¡Hoy os hablamos del poder que tiene tu despensa! Del impacto que tiene realizarse las propias conservas y organizar nuestra alimentación teniendo en cuenta nuestra salud y la de nuestro entorno. Porque cultivar y producir alimentos es un acto político muy potente, pero decidir comprar productos de temporada y de productoras cercanas y aprender a alargar su vida, transformarlos, almacenarlos y disfrutarlos durante todo el año también tiene un gran impacto y, además, ¡es una maravilla!
La soberanía alimentaria ha sido, desde los inicios del proyecto, una de nuestras metas holísticas. No queremos ser autosuficientes ya que esto nos alejaría de los vínculos que hemos creado en el territorio y porque sentimos que, poder comprar productos a las vecinas y nosotros poder venderlos o intercambiarlos los que mejor producimos, ¡es un privilegio! Hace muchos años que hablamos de resiliencia y sí que tenemos claro que, poder decidir ¿cómo te alimentas?, tiene un mayor impacto del que muchas veces somos conscientes. Nuestro plato puede ser un «arma de regeneración masiva», tomar decisiones sobre qué comemos, cómo y quién lo produce, y qué impacto tiene lo que consumimos nos da un gran poder personal.
Y ese poder no sólo lo tenemos las personas que tenemos la suerte y el privilegio de poder cultivar y producir la mayor parte de nuestros alimentos; ese poder lo tiene cualquier persona, ya que, una actividad que sí o sí hacemos, varias veces al día, es comer. Cada decisión que tomamos a la hora de alimentarnos es una decisión claramente política que ayuda o potencia un tipo de producción, una mirada hacia la tierra, una forma de relacionarnos con las personas y el entorno, una manera de cuidar nuestra salud y futuro etc.
Hace muchos años que vamos acumulando aprendizajes tanto técnicos como prácticos que nos han llevado a tener una gran resiliencia alimentaria, a producir un 70% de nuestra alimentación y, buena parte del resto, la que debemos comprar, poder decidir a quien le compramos. Hemos aprendido a planificar las producciones, a transformar y almacenar los excedentes, a hacer conservas seguras y muy sabrosas, a deshidratar, macerar y fermentar; ¡y ahora tenemos ganas de poder compartir este conocimiento con todas vosotras!
El pasado miércoles 22 de enero Febe y Ariadna ofrecieron un webinar en directo donde abrieron las puertas de nuestra despensa y contestaron a muchas preguntas.
Además, ya está disponible el curso «De la Huerta al Despensa» en el que os compartimos todos estos conocimientos con pequeños videos temáticos que os acercarán al mundo de las conservas combinando teoría sobre seguridad alimentaria y posibles patologías; las distintas técnicas de conserva; ¡y muchas recetas para poder hacer, de tu despensa, un espacio transformador lleno de delicias!